"You're going to need a bigger boat."

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lunes, 30 de enero de 2012

Películas recién vistas: MILLENIUM: LOS HOMBRES QUE NO AMABAN A LAS MUJERES

El film dirigido por David Fincher, con un reparto lleno de caras conocidas y guión de Steven Zaillian, tiene todas las papeletas para ser un exitazo comercial tan grande como el libro que adapta. Sin embargo, una vez vista, dos impresiones fundamentales quedan. Una, que es demasiado larga: no son necesarios casi 160 minutos para contar esta historia de intriga ambientada en una misteriosa región suiza, donde una antigua familia acaudalada guarda un buen puñado de misterios y secretos. Y dos: que es más el ruido que las nueces, en todos los sentidos.

Al no haber leído la novela original, no puedo comparar. Aunque la película tampoco me ha dado ganas de lanzarme a por el best-seller de Steig Larsson.  Quizá el libro contenga más elementos de interés que la trama del film, donde nos encontramos con bastantes tópicos, una intriga bastante simplona y una absoluta falta de encanto en practicamente todos los personajes, en particular en el plomizo Mikael Blomquist que encarna Daniel Craig. El prólogo a la verdadera historia del film es innecesariamente prolongado: se gastan minutos y minutos en presentar y reunir a los dos protagonistas, y el avance de la intriga hasta su resolución se alarga también demasiado.

Toda la parte de la, digamos, relación entre la esquelética Lisbeth Salander (una irreconocible Rooney Mara, en uno de esos papeles que a los actores les encanta poder luego comentar en las entrevistas) y su "encantador" psicólogo está alargada y es deliberadamente (e inncesariamente) escabrosa, en la peor tradición de los films de psicópatas que surgieron en los 90 tras el bombazo de El Silencio de los Corderos.

Pese a la siempre atinada realización de Fincher (eso no es ninguna sorpresa), la adecuada ambientación, el logrado montaje y el estupendo diseño de sonido del film (banda sonora incluida), Millenium no acaba de enganchar en ningún momento. Sin llegar a ser aburrida, le perjudican su excesivo metraje y un guión en el que el increíble hecho de que el patriarca de una familia tan, tan rica y poderosa tenga que recurrir a un periodista indómito y a una investigadora de lo más atípico para averiguar el destino de uno de sus miembros no se explica de forma satisfactoria. Por no hablar de lo poco encantador que resulta su reparto en conjunto, cosa que siempre perjudica mucho a una película.

En resumen: muy poca cosa.

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