"You're going to need a bigger boat."

"You're going to need a bigger boat."

miércoles, 17 de febrero de 2010

Películas por parejas: EL MAGO DE OZ y WILD AT HEART


Como casi todo el mundo sabrá, a estas alturas, el astuto David Lynch añadió multitud de referencias a El Mago de Oz en Wild at Heart, su lisérgica, desatada y fascinante adaptación de la novela homónima de Barry Gifford (que también contenía muchas referencias al mundo de Oz). Pero presentemos ambas películas como merecen...

En 1939, Victor Fleming rubricaba la adaptación a la pantalla grande del clásico cuento infantil de L. Frank Baum, toda una joya de la producción literaria estadounidense cuya versión cinematográfica figura por derecho propio en cualquier lista de películas musicales memorables, pese a lo azaroso de su proceso de producción, algo bien conocido entre los amantes del Hollywood clásico. El film convirtió en estrella a Judy Garland, quien protagonizaría después multitud de películas (muchas de ellas junto al inefable Mickey Rooney) y una vida personal tormentosa, por decirlo suavemente... Pese a que algunas de sus escenas parecen hoy algo acartonadas, por ejemplo la bizarra tropa de enanos cantantes (y todos deseamos, secreta y no tan secretamente, que al repelente perrito Totó le hubiera caido la casa de Dorothy encima), siempre es un placer dejarse llevar por el festival de colorines, humor (ese león cobarde y "sarasa"...), fantasía y deliciosa música que contiene: tanto la celebérrima Over the Rainbow como otras piezas musicales permanecen tan frescas hoy como ayer.

Sooomewheeere ooover the raiiinbooowwww...

En 1990 (jo, qué mayores nos hacemos... vi esta película por primera vez en un cine que ya no existe como tal, y por segunda vez en otro cine que tampoco existe ya), después de sorprender y encantar con Terciopelo Azul y antes de revolucionar la historia de las series de TV con Twin Peaks, David Lynch decide adaptar la novela Wild at Heart, de Barry Gifford, sobre dos jóvenes enamorados que huyen de la represiva madre de la chica para vivir su amor. Los dos chicos responden a los improbables nombres de Sailor Ripley y Lula Pace Fortune (en la película, interpretan los papeles un Nicolas Cage que aún no resultaba insoportable, y una bellísima Laura Dern... hija de Bruce Dern, una gran actriz y una debilidad personal mía, qué le voy a hacer). La madre de Lula, la sicótica y formidable Marietta (Dianne Ladd, veterana actriz, madre de Laura Dern en la vida real), despachará a un detective privado, Johnny Farragut (Harry Dean Stanton) para que se encargue de que "su niña" vuelva a casa. En el camino, los dos amantes se cruzarán con multitud de personajes y situaciones, a cual más inquietante... como una antigua "amistad" de Sailor, la peligrosa Perdita Durango (una mareantemente guapa Isabella Rosellini) o el siniestro Bobby Perú (un histriónico, divertido, reptílico e impagable Willem Dafoe).

Sailor y Lula.

Si en la novela de Gifford las citas al mundo de Oz son explícitas, acentuando el espíritu aniñado de una inocente Lula, y establecen un adecuado contrapunto a lo escabroso del camino de los amantes, en la película de Lynch el contraste es aún mayor, dada la conocida afición del director de Missoula de cargar las tintas al máximo en la violencia y no cortarse un pelo en las escenas de sexo.

Repasemos: los zapatos de rubíes de Dorothy se convierten en zapatos rojos de tacón alto para Laura Dern, pero el gesto de entrechocar los tacones está presente; las referencias a Oz en los dialogos son constantes; la madre de Lula, la formidable Marietta, aparece retratada en varias ocasiones como la bruja maléfica, y su retrato desaparece borrado cuando Lula le arroja una bebida... como la bruja mala del oeste cae desintegrada por el agua que le lanza Dorothy (en el caso de Lula, la acción parece más intencionada, pero recordemos que Dorothy ignoraba lo que el agua podría hacerle a la bruja...). La bola de cristal con la cual "alguien" sigue los pasos de Sailor y Lula es idéntica a la de la bruja mala (incluso el plano es igual al de la película de Fleming). Big Tuna, ese pueblucho en medio de ninguna parte, equivale a todas las peripecias que Dorothy y sus amigos pasan hasta llegar a Oz. La bruja buena (encarnada por la guapísima Laura Palm... estoooo, Sheryl Lee) también aparece, para "salvar" a Sailor y enseñarle el buen camino...

He visto Wild at Heart multitud de veces, y me sigue encantando. Lula y sus conversaciones chaladas, Sailor y su chaqueta de piel de serpiente... Como casi todas las películas de su director, Wild at Heart es visualmente impactante, con una fotografía de colores fuertes, de aire a western clásico, lo cual contrasta con sus turbadores estallidos de violencia (y es que Sailor tiene una peligrosa costumbre de perder el control...) y otras escenas escabrosas (como la del accidente de tráfico) y sus más que explícitas escenas de sexo. Numerosas caras conocidas de otras obras de Lynch aparecen a lo largo de la cinta, en pequeños papeles: Grace Zabriskie, Jack Nance, Sherylinn Fenn...

Al contrario que Sailor y Lula, Dorothy hace amigos por el camino (de baldosas amarillas)

Como Dorothy en El Mago de Oz, Sailor y Lula huyen de casa para buscar su lugar en el mundo. Dorothy escapa de su mundo en blanco y negro a un lugar de fantasía, tan encantador como peligroso. Sailor y Lula, simplemente, se fugan, y listos. Sin embargo, la conclusión es radicalmente distinta: para Dorothy, el final del arco iris sólo esconde una fantasía, y no hay nada como el hogar; su empeño es volver a casa, y su peripecia es un sueño febril del que despierta felizente de nuevo en su granja. Sailor y Lula, tras todos los pesares y peligros, alcanzan su propio final del arco iris encima del capó de un coche, cuando Sailor le canta Love Me Tender a Lula, ya madre de su hijo (claro, tanto va el cántaro a la fuente...), por fin. Quizá después su vida sea tan normal como la de cualquier pareja... o quizá no.

Pero eso ya no es nuestro problema...

Looooooove meeeee Tendeeeeer...


PS: Una nota interesante: en la más reciente edición en DVD de Wild at Heart, aparece censurada, con una nubecilla de humo que atenúa su crudeza original, al menos una escena de las más escabrosas y espeluznantes del film: la de la "salida de escena" (es un decir) de Bobby Perú (quien haya visto la película sabe a qué escena me refiero). ¿Lynch se hace mayor? ¿Imposiciones de los propietarios de los derechos? En cualquier caso, que quede constancia de ello. Se puede comprobar con versiones anteriores...

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Que malita es la drooonnngggaaaa...¡¡¡

David dijo...

Vaya! Se te ha "olvidado" mencionar que la escena de Somewhere over the rainbow la dirigió un cineasta más genial que Lynch, y que no fue el director titular de El mago de Oz.
Recuerdo la peli de Lynch. Me gustó. Por aquella época me encantaba el actor que hacía de Bobby Perú... Qué rápido desaparece de escena.. Qué malo si han censurado dicha escena como comentas. Ay! Cómo están los tiempos. Me dio hasta pena cómo desaparecía tb el personaje de Harry Dean Stanton. Cuántos años! Creo que la vi un par de veces, pero hace muchísimo que no la he vuelto a ver. Isabella estaba muy curiosa de rubia. Un saludito.
Un post muy majo, por cierto.

Mikel dijo...

No se me ha olvidado, no. Lo que pasa es que el asunto del rodaje de EL MAGO DE OZ daría para tres o cuatro posts, ello solo! Hala, ya sabes, ahí tienes un tema.
Willem Dafoe estaba en la cresta de la ola, en aquellos tiempos; hizo más cosas, y sigue trabajando en cine de vez en cuando, pero está bastante desvinculado del cine comercial, y lo que le gusta es el teatro.
Gracias por el comentario...

BELDARIN dijo...

Hola Amigo Mikel aunque sigo esperando y esperando y esperando su critica se sherlock puedo entretenerme con esta lectura interesante veo que echa de menos a lynch. Es un director grande entre los grandes y perdido entre los perdidos. Pero me encanta sus peliculas aunque no las entienda. Esta en un peliculon y la verdad es que me gusto mucho muchito.

Mikel dijo...

Me alegro de que te consueles... porque puedes esperar sentado la reseña de SHERLOCK HOLMES; me da una pereza espantosa, o sea que creo que voy a pasar.

Anónimo dijo...

Tu te lo Holmes