"You're going to need a bigger boat."
viernes, 2 de abril de 2010
EL MONTÓN DE TEBEOS presenta... ALICIA EN SUNDERLAND
Tenía muchas ganas de hacerme por fin con este álbum de Bryan Talbot, un autor que me gusta cantidad. Pese a ello, este libro me había dado un poco de miedo en su versión original: gráficamente extraño, poco dibujo, mucha foto retocada, quizá demasiado farragoso, muchas páginas, mucho texto... y decidí aguardar a la edición española, que acaba de salir a la venta, cortesía de Random House Mondadori (por cierto, excelente, en presentación y traducción).
Lo primero que hay que destacar es la singular propuesta gráfica del libro, visible con sólo hojearlo. Talbot, un narrador y dibujante más que dotado, elige esta vez una abigarrada y colorista combinación de fotografías retocadas en Photoshop, documentación gráfica (grabados, retratos...) y dibujo tradicional con numerosos cambios de estilo, rompiendo los esquemas de una narrativa de cómic tradicional. Lo que en un principio puede parecer un batiburrillo difícil de "leer", se revela sorprendentemente dinámico, atractivo y efectivo en las hábiles manos de Talbot, quien sale airoso del empeño. Pero su peculiar aspecto gráfico (realmente es un cómic que no parece un cómic, a primera vista) es solamente uno de los aciertos de este libro, en el que Talbot ha invertido cuatro años de trabajo.
El autor maneja la amplísima documentación que ha reunido con efectividad, dando forma a un guión cuidadísimo, mezcla de investigación sobre Alicia y Lewis Carroll, de recuento de la historia de Sunderland y los vínculos de ésta con hechos históricos de gran envergadura para Gran Bretaña, y de comentario irónico (a veces con mucha mala leche) a esos grandes hechos, con Sunderland como ejemplo. Una propuesta ambiciosa, la cual el propio Talbot se encarga de desmitificar y convertir en un juego lúdico, incluyéndose a sí mismo como personaje y narrador, desdoblándose en varios papeles distintos, que interactúan entre sí, comentan, discuten y charlan con personajes reales e históricos del libro con la mayor naturalidad.
Manteniendo una cercanía contínua, un tono de colegueo con el lector que hace muy agradable la lectura y elude cualquier tentación de "pasarnos por la cara" todo lo que sabe, Talbot incluso se critica a sí mismo cuando cree que el relato se atasca (ese momento genial del bostezo); duda, reflexiona sobre la titánica tarea que se ha autoimpuesto, marca los tiempos y las pausas de manera original (el libro incluso tiene un intermedio), adopta recursos del teatro (el escenario, la apelación al público, el tono ligero de vodevil), y arroja nueva luz, con datos en la mano, sobre muchos de los mitos que rodean a Carroll y su célebre obra. Incluso plantea toda una nueva hipótesis acerca del origen de Alicia, más relacionado con Sunderland de lo que algunos en Oxford querrían admitir...
Así, Alicia en Sunderland es una especie de truco de prestidigitador: Talbot juega con el lector, dialoga y cuenta historias como las contaría a un amigo, de manera coloquial (el arranque del libro es colosal, en este sentido), reivindicando el valor de descubrir las miles de cosas que nos rodean y que no sabemos... Su acercamiento, voluntariamente "desordenado" y caótico, remite ineludiblemente a la excusa del mismo, Alicia, la inmortal narración que lleva conquistando a generación tras generación desde la época victoriana. El libro de Talbot es una canto de amor a la historia ideada por Carroll, su carácter transgresor y su ausencia de moraleja, y a la ficción en general, además de una invitación a conocer las inesperadas maravillas que pueden rodearnos en cualquier lugar, en cualquier momento.
Talbot salta de un tema a otro, de un lugar a otro, con fluidez, sin hacerse pesado ni farragoso en ningún momento. Eso sí, el libro requiere del lector una actitud atenta y juguetona. Quien espere una historia lineal a la manera tradicional no la encontrará en la Alicia de Talbot, al igual que las dos partes de Las aventuras de Luther Arkwright distan mucho de ser una narración de ciencia-ficción al uso. Dicho lo cual, sólo puedo recomendar fervientemente a cualquiera que guste de la lectura, de la fantasía, o simplemente tenga interés por saber más de Carroll y Alicia (de rabiosa actualidad una vez más, gracias a Tim Burton), y que sobre todo tenga ganas de pasar un rato estupendo y además aprender algunas cosas, que se deje llevar y se zambulla en este original, adictivo y juguetón libro creado por Bryan Talbot.
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2 comentarios:
A mí también me pareció algo "farragoso" cuando lo ojeé, pero si dices que es tan bueno. Me ha parecido curioso lo del Intermedio.. Como en las grandes superproducciones de jolibúd (las pelis de Lean, por ejemplo). Un saludito (y gracias otra vez).
Ah! El post que hay más abajo: SC
Ya te digo, lo empiezas a leer y te olvidas, porque engancha cantidad!
Ah, y por cierto, gracias, Víctor!
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