1. La Compañía del Anillo: "Yo llevaré el Anillo a Mordor"
De las tres entregas fílmicas, esta es sin duda la más redonda. Siguiendo con fidelidad la estructura de la novela, Peter Jackson nos presenta a los personajes principales en la primera parte del film, hasta la escena del Concilio de Elrond; y reserva la segunda para el discurrir inicial del viaje hacia Mordor y sus avatares.
Desde el principio, el espectador se encuentra inmerso en un mundo de fantasía con una impresión de realidad asombrosa, gracias a una mezcla de vestuarios, maquillajes, decorados reales y efectos visuales de todas clases, todo ello manejado con una creatividad y un acierto fuera de lo común. El espectáculo visual está garantizado durante todo el metraje, empezando por la espectacular introducción que nos lleva desde el Daño de Isildur hasta Hobbiton, y desde Lothlorien y el hogar de Galadriel, hasta Moria primero y la batalla final con los Uruk-Hai después.
Aventura, fantasía, terror, humor: todo ello se encuentra en grandes cantidades en el film, bien distribuido gracias a un guión, escrito por el propio Jackson con Philippa Boyens y Fran Walsh, que olvida la "paja" del original literario y se concentra en la clave: el conflicto entre el bien y el mal. Fuera del film quedan, por ejemplo, el personaje de Tom Bombadil, y las canciones que TODOS nos saltamos al leer la obra… El integrista de Tolkien (al menos, alguno de ellos) protestará por esas decisiones argumentales. El profano ni lo notará.
Es imposible elegir un momento, una escena de la función: nada desentona, todo funciona como un reloj. Un estupendo reparto de caras conocidas (Ian McKellen, Elijah Wood, Viggo Mortensen, Cate Blanchett, Ian Holm, Christopher Lee, Liv Tyler, Sean Bean…) y menos conocidas hasta entonces (Dominic Monaghan, Sean Astin, Orlando Bloom, Billy Boyd…) da vida a un grupo de personajes de lo más variopinto, con cuidadísimas caracterizaciones. Y un personaje adicional es el propio Anillo, con su inquietante murmujeo recorriendo la trama de principio a fin, siempre alerta para corromper a cualquiera que se atreva a tocarlo.
El mejor elogio que se le puede hacer a Jackson es que consigue un mundo de fantasía tan coherente, perfilado y atractivo que siempre apetece volver a visitarlo. Un film estupendo que la versión extendida en DVD redondeaba con escenas inéditas, perfectamente colocadas a lo largo del metraje. Una astuta estrategia comercial que también ha creado escuela, para bien y para mal.
Y como sucedía al final de El imperio contraataca… resulta que esto no acaba aquí. La aventura acaba de empezar.
Continuará...
2 comentarios:
Entre los "ilustres desconocidos" se encuentra aquel niño que protagonizó Los Goonies.
Ah perdón, que no la has visto, como tantas otras películas ochenteras de la factoría Amblim.
Pues en efecto, chico, no la he visto... y ya sabes que no tengo propósito de enmienda. Ni muchas otras "generacionales" de esas, jaja! Debería haber dicho "ilustres desconocidos para el gran público por entonces", más adecuado... Gracias por el comentario, Mr Osterman!
Publicar un comentario